En Chile, las aventuras del más famoso agente seceto al servicio de Su Graciosa Majestad, se publicaron primero en la década del 50 en las páginas de la clásica revista «Okey», con fidelidad a las novelas de Ian Fleming (1908-1964), su autor, y se desarrollaron en un formato de tiras cómicas con abundantes didascalias. Pero a fines de los 60, con 5 películas ya en pantalla («El Satánico Dr. No», «De Rusia con amor», «Goldfinger», «Operación trueno» y «Sólo se vive dos veces»), aquellos cómics tenían sabor a viejo. y quizás pensaron eso en la editorial ZigZag cuando compraron los derechos para convertirlo en revista con un equipo enteramente nacional y como un comic book.
La editorial chilena Zig Zag obtuvo la licencia para publicar cómics de James Bond en la Argentina, Chile, Paraguay y Perú en 1968.
En lugar de un equipo de dos hombres, como el que produjo las tiras de periódico británicas, Zig Zag utilizó al artista y escritor Germán Gabler para producir las aventuras. Gabler nació en Santiago de Chile en 1942, y comenzó a dibujar en su primera infancia.
Primero trabajó como artista de cómics profesional con la ayuda de Jorge Carvallo, quien le presentó a la editorial Zig Zag. Fue contratado inicialmente como guionista, y colaboró con su hermano Guillermo en varias historietas.
Gabler tenía la ventaja de un inglés fluido, y podía usar materiales originales de Ian Fleming años antes de que fueran traducidos a castellano. Siguiendo el ejemplo de las películas, las adaptaciones de Gabler solían incluir una secuencia pre-título brillante y de ritmo rápido, con la historia principal basada en el trabajo de Fleming, para luego divergir hacia sus propias historias originales. El agente luchaba entonces contra los soviéticos y todo aparecía teñido por la lógica occidental de la Guerra Fría. Gringo bueno, ruso malo. Sin embargo, la línea argumental de la revista no permanecía anclada a esa lógica. Porque Germán Gabler tampoco compartía el universo maniqueo de los relatos originales. Si en los cincuenta todavía funcionaba, cuando las novelas hicieron su aparición en el mercado, ya próximos a los setenta, aquel tono podía parecer odioso. El mundo y Chile eran otros. Necesitado de malos, Germán Gabler creó su propia organización criminal, Tarántula e, incluso, un amigo ruso, Prochenko, quien mantenía una relación de cercanía y leve rivalidad con el agente británico. Aunque con licencia de Glidrose (ahora Ian Fleming Publications), y atado al personaje literario de 007, la representación de Bond en los cómics se basa claramente en el personaje cinematográfico de Sean Connery.
Otro artista chileno, Abel Romero, proporcionó muchas de las portadas y algún arte interior, (al parecer, una vez dijo que él dibujaba en el cine, mientras que veía películas de Bond). Romero fue uno de los artistas de cómics más prolíficos de Chile, y había trabajado en ese campo desde la década de 1950. Estudió en la Escuela de Artes de la Universidad de Chile entre 1945 y 1947. Poco después se fue a trabajar para la agencia Propagandas Cañas, donde realizó el arte promocional de compañías de cine norteamericanas.
Además de Gabler y Romero, el equipo también incluyó a artistas como Hernán Jirón, Lincoln Fuentes, Óscar Vega (Oskar) y el argentino Luis Avila.
A pesar de sufrir la mala calidad de impresión y un arte muy lejos del de John Mclusky o Yaroslav Horak, la publicación del 007 de Zig Zag tuvo éxito en América del Sur. Pero cuando el socialista Salvador Allende fue elegido presidente en 1970, el clima político cambió drásticamente en Chile y James Bond pasó de héroe célebre a símbolo del fascismo occidental, causando el cese de la publicación.
Cuando se produjo el golpe militar en 1973, Romero se centró en sus tareas de publicidad, y viajó por Perú y Europa. Eventualmente se estableció en Suecia en 1978, y permaneció allí hasta 1993. Durante su estancia en Suecia, dibujó para Semic, pero no en sus publicaciones de James Bond.
Cuando Zig Zag se convirtió en Quimantú, Gabler dejó la firma para trabajar en el campo industrial por un tiempo. Por entonces también comenzó a ilustrar adaptaciones de novelas a cómics para una editorial argentina.
A mediados de la década de 1970, publicó dos revistas propias. La primera fue Asesino, que era de hecho una continuación de 007, pero esta vez con la cara de Charles Bronson.
Más tarde, Gabler se convirtió en director general de SGM y comenzó a suministrar historietas para la editorial británica Fleetway. Sus trabajos para Fleetway fueron el final de su obra en este medio. En la década de 1980, se centró en su trabajo para la televisión y la radio.
Durante su corta carrera, la publicación "007" de Zig Zag produjo 59 ediciones, terminando con el cómic irónicamente titulado "Los condenados". Estos cómics son ahora muy codiciados objetos de colección, y conseguir toda la serie es un desafío digno del mejor seguidor de 007.
Fuentes: MI6. The home of James Bond 007 y La Panera
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QUE MARAVILLA DE MATERIAL. MUCHAS GRACIAS. CUIDAOS. UN ABRAZO DESDE MADRID
ResponderEliminarIncomparable con el Bond que publicó la Editorial Columba con loa fantásticos dibujos de Yaroslav Horak. Interesante que pudieran hacer una recopilación de esas tiras. Saludos. Javier.
ResponderEliminarEstá hecha, Anónimo, ten paciencia.
EliminarMuchas gracias. Yaroslav Horak es una leyenda viva del cómic. Su Bond es lejos el mejor para mí.
ResponderEliminarSaludos cordiales.
Javier.
Me gustaría saber si hay la posibilidad de que alguna editorial sacara al mercado esas novelas graficas para que la generación de ahora sepa de estas obras de arte de antaño.
ResponderEliminarExcelente el material presentado, en Chile tuvimos los mejores cómics de América, junto a James Bond, Jinete Fantasma, Capitán Jupiter y las revistas bélicas como Trinchera, S. O. S y U-2. Fue nuestra era de Oro.
ResponderEliminarMe acuerdo de haber leído esas revistas.....en los años sesenta....
ResponderEliminarHola ,buenas noches ,que tal,soy Sergio de Montevideo Uruguay,eh leído en otra época estás viejas revistas del 007,excelente publicación de antaño en los 70 aproximadamente en mi época de preadolescencia,hoy día eh recuperado algunas de ellas,yo,me gustariadiría unas cuantas
ResponderEliminarHola de nuevo soy SERGIO,ME REFIERO A LAS DE GERMAN GABLER Y HERNAN GIRÓN ,FUERON Y SERÁN FANTASTICAS,
ResponderEliminarPor último,soy Sergio de nuevo, ahora las colecciono desde hace un tiempito,me faltan algunos Bros la NRO 20 y la 48 hasta la 59, me interesaría mucho conseguirlas si existiera la posibilidad, gracias
ResponderEliminarMuchas gracias
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