lunes, 31 de diciembre de 2018

NIPPUR MAGNUM 138 Agosto de 1996 Ed. Columba. Aporte de ÓscarSNM


NIPPUR MAGNUM fue una publicación de la editorial argentina Columba,
se editaron 186  revistas entre los años 1979 y 2000 .
Contiene 84 páginas. 
Revista mensual de historietas completas de aventuras y acción
Al igual que otras revistas de la editorial, tuvo dos títulos paralelos: Nippur Magnum Todo Color
  y Nippur Magnum Anuario, ambos con numeración propia.
 También aparecieron posteriormente, además de los números ordinarios,
las ediciones Todo Color, lanzado en 1981 (portada: Dago), Anuario y Súper Anual, 
todas ellas con numeración propia.


Nippur: (E-225) Naleh (Robin Wood / Villagrán)
Dennis Martin: (E-30) El padrino de la boda (Pablo Turnelli / Angel Alberto Fernández)
Jackaroe: (E-31) Un caballero andaluz (J. P. Wanamaker / Juan Dalfiume)
A Medianoche: (E-8) Retrato al viento (José Luis Arévalo / Mangiarotti)
Águila Negra: (E-23) Gracias a la vida (Ray Collins / Solano López)
Capitán Camacho: (E-24) Therese (Julio Alvarez Cao / Carlos Casalla)
Dago: (E-3) La muerte de Piris Bajá (Robin Wood / Salinas)

PORTADA: Alfredo de la María

97 páginas
 Aporte de ÓscarSNM        Sin info del escaneador.






 


 

domingo, 30 de diciembre de 2018

Pánico Ep2 03 - Gorgien. Escaneo inédito j.Rab



Nuestro colaborador  j.Rab, continuando con esta colección, 
nos ofrece otro excelente escaneo inédito de esta magnífica revista 
publicada en 1978, con 36 páginas.
Más información sobre esta colección en la entrada de 19/05/17,
también se pueden disfrutar  de otros 4 números más,
 escaneados por nuestro colaborador.

Contenido: 

Portada: J. Porredón

Gorgien  Guión: No consta / Dibujos:  Antonio Borrell, (pág. 3 )

Treinta jarrones, treinta vidas.  Autores desconocidos (pág. 12 )

La Diosa.  Guión y dibujos: No consta (pág. 22 )

El beso de la muerte.  Historietista: J. García   (pág. 30 )





  



Obras de Eduardo José Savid - EAGZA


























El dibujante argentino Eduardo José Savid nació en Córdoba, capital, a mediados de los sesenta del pasado siglo y allí cursó un par de años en Bellas Artes.

Savid dice: “Mi viejo era un fana lector de Historietas. Y un talentoso artista amateur. Viviendo en Córdoba y después de incursionar en publicidad, se dedicó al Derecho como salida laboral. Creo que heredé los genes y él me inculcó el amor por la historieta. No sé si maestros artísticos, pero artistas a los cuales he tenido como guía e inspiración. Lo primero que me pegó a los 8 años fue el Príncipe Valiente que republicaba Columba, lo coleccioné hasta los 18. El Sunday de Víctor de La Fuente. Tte. Blueberry de Giraud. Los trabajos de Francois Bourgeon. Aldo Di Gennaro, Micheluzzi y Toppi. Mort Cinder de Alberto Breccia. Savarese, de Mandrafina. Joe Kubert y Alex Toth. Todo lo que me gustaba estaba resumido en ellos.”

A los 15 años entró a trabajar en una agencia de publicidad, haciendo ilustraciones para los Diarios locales. Para el año siguiente ya estaba trabajando como ilustrador para el suplemento infantil del diario Los Principios de Córdoba, todo eso, sin dejar de cursar la escuela secundaria.

En la historieta comenzó a los 19 años en Columba, en Rick del Caribe (con guiones de Álvarez Cao) con Lito Fernández, como su asistente en su estudio ATALAYA, borrando páginas, después haciendo fondos, entintando y, finalmente, interpretando un guión. Allí conoció a los profesionales que hacían la historieta Argentina. De esa época son Chinatown (1985), con guiones de Ray Collins (Zappietro), o Pressing (1986), con Ray Collin y Roger King (Rogelio Galichio).

Sus primeros trabajos para el exterior fueron para Récord de Italia, Red Scott, aventuras estilo Indy Jones. Después de eso realizó trabajos para editoriales independientes americanas y europeas. Y por supuesto los trabajos para Disney, Warner y Cartoon Network

Eduardo Savid, residente en los EEUU, ha dibujado cómics con personajes de Disney, así como personajes de Warner Bros. Hizo historias de 'Talespin' y 'Aladdin' para Disney Adventures, así como historias de 'Aladdin' para el título de Marvel's Aladdin. En DC, ha hecho 'Laboratorio de Dexter' y 'Looney Tunes'. A través de Atlantis Studios, ilustra cómics personalizados como 'Carrie Giver', 'Myumba' y 'Tears of the Dragon'.

Fuentes: Blancas murallas y Lambiek  





 Contenido:

Solo - Ricardo Ferrari - Eduardo Savid - EAGZA
El Asesino - Mark Escher - Eduardo Savid - EAGZA
El Veterano - R. Ferrari - E. Savid - EAGZA
Pressing - R. King-R. Collins - E. Savid - EAGZA

sábado, 29 de diciembre de 2018

Terciopelo Negro (completo) Ed. Maga - EAGZA



TÍTULO: Terciopelo Negro
EJEMPLARES: 25
AÑO: 1954
EDITORIAL: Maga
DIBUJO: Las portadas de los primeros números fueron realizadas por José Ortiz; posteriormente las dibujó Leopoldo Ortiz.
GUIÓN: F. Amorós
TAMAÑO: 17 x 24 cm
GÉNERO: Aventuras de capa y espada
[Ficha en Artium]


Aventuras venecianas rociadas generosamente de conspiraciones y misterios. Una acción que transcurre, invariablemente, dentro del clásico ambiente de la ciudad de las góndolas, con los canales y palacios como escenarios principales.

Marco Escipión, un joven de 15 años, asiste resignado a la renuncia de su padre al trono, renuncia que lleva implícita el auto destierro en compañía de su esposa y del propio Marco. Ambas decisiones son contempladas con regocijo por un hombre, malvado como pocos, llamado Sergio Venarola, que se ha apoderado por la fuerza del título de Dux de Venecia.

Durante la huída, el joven Marco decide finalmente quedarse en la ciudad, ya que, según él mismo argumenta, le será más fácil pasar desapercibido. Su objetivo no es otro que el de recuperar el trono tan mezquinamente arrancado a su padre.

Un maestro de esgrima español será el culpable de la diabólica habilidad que pronto destilará con la espada, lo que le convierte en un afamado y temido espadachín. Cuando está seguro de que ha llegado el momento de luchar contra el opresor, el carnaval veneciano le pone en bandeja un objeto de terciopelo negro, máscara que le dará renombre.

Desde ese momento, desdoblará su personalidad con el fin de llevar a cabo sus objetivos sin que nadir sospeche del pacífico Marco Escipión. En una laberíntica trama, en la que aparte de los peligros no faltan los amoríos, ni las sorpresas, Terciopelo Negro logrará restaurar nuevamente en el trono a su padre. Éste, en agradecimiento, se lo ofrece como regalo de bodas. Silvia, su primera novia, hija de un noble comendador, será la elegida cuando apenas se ha repuesto de la sorpresa sufrida al conocer que Marco Escipión y Terciopelo Negro son la misma persona.

Terciopelo Negro supuso la segunda incursión de Leopoldo Ortiz en el ámbito del cuadernillo de aventuras. Sin lugar a dudas, esta creación, ambientada en la Venecia renacentista y con un héroe enmascarado de lo más variopinto, es una de las colecciones más nostálgicas de cuantas abordó la editorial Maga.

Un clásico guión que, sin embargo, mantiene el interés del lector desde el primer momento. La iconografía veneciana aporta al entorno de la acción momentos de evidente sugestión. También los externos y personalísimos rasgos del personaje central hicieron de esta serie un producto de gran atractivo comercial.
Fuente: Baena, Paco. La magia de Maga desde la nostalgia, p. 267.


Dibujo
JOSÉ ORTIZ MOYA

José Ortiz Moya nació en Cartagena en 1932. Dibujante, guionista e historietista de acción, fue premio Warren en 1975. Integrante de la Escuela Valenciana, y continuador de Vampirella. Sensible e intuitivo iluminador se inició en 1950 con la serie Henry Manfredy en la revista Chicos. Sin recuperar parte de su dilatada obra para el mercado exterior con serie como Carolina Baker, Ken Parker, Robin Hood o Tex, y lejos de sus mejores y más directos trabajos, como el serial Sigur (1958) o la monografía olvidada Las Cruzadas (1957), se asoció al guionista Antonio Segura en los años ochenta, para afianzarse en el mercado con una amargura y descreída visión de los desiertos postnucleares. Fuente: Cuadrado, Jesús. De la historieta y su uso: 1873-2000. Madrid: Sinsentido, 2000, pp. 934-935.

LEOPOLDO ORTIZ MOYA

Leopoldo Ortiz Moya. Cartagena (Comunidad de Murcia), 1930. Dibujante/guionista. Antes de retirarse al publicismo (años ochenta) fue firma puntual en la Escuela Valenciana; viajero de desagradecidos mercados (Tarzán), llegó a ser el más exquisito planificador de su generación y un férreo y expeditivo organizador de los elementos que integran el ritmo interno en cada viñeta; su mejor obra, Bengala (1959), evidenció a un autor dotado de una capacidad muy especial para ensamblar su propio ritmo al del guionista. (Hermano mayor del también historietista José Ortiz). Fuente: Baena, Paco. La magia de Maga desde la nostalgia. Barcelona; Glénat, 2002, pp. 936-937.

Guión
FEDERICO AMORÓS MARTÍN

Federico Amorós Martín nació en Valencia en 1914 y murió en 1991. Guionista, pintor, narrador, amante del folletín y casi precursor del genero de espada y brujería, autor pendiente de la Historieta infantil, brillante creador de sagas de espadachines, y un pionero en las aventura de la edición independiente al dirigir el tebeo Pituko (Grafidea 1949). Camufladas por el contexto histórico de la España de los años cincuenta y sesenta, sus mejores historias están en el serial Roberto Alcazar y Pedrín, donde la rica y compleja fantasía de la trama de algunos episodios aun estarían por descubrir para el gran público, también dejó seriales de tan precisa e impecable construcción que en la práctica son ejemplos de narratología (Mascarita, 1949)”.
 Fuente: Cuadrado, Jesús. De la historieta y su uso: 1873-2000. Madrid: Sinsentido, 2000, pp. 48-49



Ofrecemos la colección completa por gentileza de los escaneadores  Carlos Z y Chani[CRG]





viernes, 28 de diciembre de 2018

Supermán 1276 Ed. Novaro. Escaneo inédito de Arcano9


Arcano 9 nos ofrece en esta entrada la revista1276 de  la "Serie Águila" , 
escaneado con su maestría habitual  de un ejemplar original en papel,
 con gran limpieza y sin marcas .

Publicado el 26 de Agosto de 1980.  36 páginas 
Sus autores son:
Curt Swan  (Dibujo)  y Cary Bateso (Guión)

 
Desde aquí, y en nombre de todos nuestros lectores, agradecemos encarecidamente
a nuestro amable colaborador sus desinteresadas aportaciones. 



 

Recordando a... Balbi - EAGZA




ALBERTO JESÚS BALBI

Nacido en 1942, Alberto Balbi (así se lo nombra en una nota que le hizo la revista Dibujantes en 1966), sí puede ser considerado un “maestro olvidado”. Publicó sus primeros trabajos en la revista Corso Pete en 1959. Para la misma época colaboró también en Puño Fuerte y Fuego y formó parte junto con Lito Fernández, José Muñoz, Rubén Sosa y Leopoldo Durañona, entre otros, del grupo de jóvenes que en Hora Cero y Frontera y luego en Batalla Inolvidables reemplazaron a aquellos dibujantes mas notorios que por diversos motivos habían dejado de colaborar en esas publicaciones. Durante ese período en Editorial Frontera Balbi realizó episodios de Ernie Pike, de Cuentos de la Ciudad Grande y unitarias de distinta índole, donde se destaca por la fuerza de su estilo.

Tras realizar el servicio militar se aleja temporariamente de la historieta para dedicarse al dibujo animado. No sin dificultades logra posteriormente vincularse a Columba a mediados de los sesenta y, ya sea por decisión propia o por imposición de la editorial, cambia radicalmente su estilo y pasa a una linea mucho más clara con la cual realiza por ejemplo “Detective del Aire” en El Tony en 1966 y posterirmente en 1968 e ilustra algunos de los primeros guiones de Robin Wood, entre ellos “Esa pequeña nostalgia color oro” y “Ella, él y la nostalgia”, ambas en Intervalo.

En 1971 dibuja en la revista Top episodios de Ernie Pike y de la serie “Más allá del planeta Tierra” y colabora en las revistas El Huinca y Fabian Leyes donde, entre otros trabajos, realiza historietas sobre la vida de caudillos argentinos con guiones de Jorge Morhain. En 1974 y utilizando un estilo semihumorístico dibuja en Satiricón dos historietas tituladas “Australio Onofre Susvin” y “El General Susvin” con guiones de Carlos Trillo.

En 1979 junto con Enrique Cristóbal realiza unitarias del género western para Record, que se publicaron en Skorpio Gran Color. Colaboró también para la Skorpio italiana, siendo uno de esos trabajos el titulado “Giungla di pietra”, publicado en 1980. En los años ochenta vuelve al dibujo animado y sigue colaborando con Record-Eura con trabajos como “Historias de New Orleans”, “Por una flor”, “Historia movida”, “Los genocidas”, “Kukulkan” (con Oswal) y “Gatos, ratones, etcétera”, en los cuales interpretó guiones de Alfredo Grassi, Ricardo Barreiro y Carlos Trillo, entre otros autores. Este vínculo de Balbi con Record no parece haberse extendido más allá de 1987-1990, no existiendo luego de esa fecha mayor información sobre su actividad profesional.

En enciclopedias o historias se lo menciona como discípulo de Alberto Breccia en la Escuela Panamericana de Arte en los años sesenta, junto a Rubén Sosa, Leopoldo Durañona, José Muñoz y Jorge Moliterni.

José Massaroli señala que alrededor de 1986 fue su compañero en el estudio de animación Jaime Díaz, y trabajaron juntos en una serie llamada Wildfire, para Estados Unidos. Además, subraya que tenía fama de ser “el mejor alumno de Breccia” y que colaboró con Lito Fernández en un capítulo de Precinto 56 (1974), guionada por Ray Collins.

Esta recopilación sólo aspira a apoyar una recuperación de su figura, con la esperanza de que algún experto en el tema emprenda una investigación sobre su obra.

Tal vez la razón de que sea poco conocido se deba al hecho que sólo dibujó historietas autoconclusivas y nunca gestó en dupla con un guionista un personaje o una saga, que tanto predicamento aportan si son exitosos. Por eso, sólo comentaremos algunas de sus producciones aparecidas en la famosa revista Skorpio.

En Los genocidas (1985), el guión de Emilio Balcarce describe una invasión a la Tierra por parte de unos robots gigantes, también denominados “Los ángeles del Apocalipsis”. Balbi emplea abundantes y logradas aplicaciones a pincel y prueba ser un maestro en el manejo de las sombras. Su trazo fresco y ágil incursiona en manchas, negros plenos, texturas y líneas que estilizan los cuadritos. A veces representa la figura humana mostrando sólo su contorno y sugiriendo con gran sentido de la síntesis las facciones y la vestimenta. Hay una nave espacial de original diseño.

Alfredo Grassi ambienta Kukulkán (1985) en la selva, en donde un arqueólogo y su guía buscan la ciudad perdida de ese nombre. Balbi se emplea a fondo planteando planos generales de notable calidad. Otro de sus aciertos y marcas de estilo son los personales registros de las nubes, y las caras expresivas de los personajes porque cincela los rasgos y gestos con innumerables detalles. Es todo un hallazgo un plano general alejado y en picada que muestra la misteriosa ciudad. Además, el exhibe su talento plástico al registrar lugares tenebrosos y opresivos, como los templos de dioses desconocidos.

El monólogo interior de un personaje atormentado por la automatización de una sociedad, cuyos habitantes son “robots asquerosos de carne y hueso”, preside el texto de Alguien por quien morir (1986), de Roger King. El estilo innegablemente clásico de nuestro artista se acerca, con sus blancos y negros contrastados, al Alex Raymond de Rip Kirby (1946) y expone un diseño de página muy profesional.

El guión imaginativo de Carlos Trillo presenta en Evelyn (1986) a tres personajes que huyen desde diferentes sitios y por distintos motivos para confluir en la “Calle de Las Cabezas Perdidas” y componer un singular trío que se lanza tras apasionantes aventuras en Bombay, India. Aquí Balbi aprovecha la oportunidad para cambiar continuamente de planos y exhibir su virtuosismo: interiores de templos extraños y monumentales, la ciudad nocturna, la fascinante fauna de la selva y la refinada belleza de la heroína. La tapa de este Super Skorpio Nº 130 (Libro de Oro) corresponde a esta historieta.

Gatos, ratones, etcétera (1987), escrita por Guillermo Saccomanno, es una interesante historia de dos delincuentes que persiguen a un tercero, que escapa con una maleta llena de dinero hasta desembocar en un callejón sin salida. La trama ofrece un paralelismo con la peripecia de dos gatos que corren tras un ratón que se esconde en ese mismo paraje. La ambientación nocturna permite a Balbi lucirse con varias técnicas de sombreado.

Ricardo Barreiro en La momia (1987) plasmó la acción en unas catacumbas, y utiliza numerosas viñetas mudas, factor del que se sirve el artista para exhibir su grafismo, sobre todo en la escena final en la que la imagen reemplaza el comentario del texto.

Fuentes: Mil Plumines Argentinos y La Duendes