El pasado 30 de octubre, se cumplió
medio siglo de la publicación del primer ejemplar de la revista
”Mampato”.
Una efeméride que, por fortuna, no ha quedado en el tintero.
Mampato 001 |
Podemos leer en el periódico EL MERCURIO (Santiago de Chile) del 3 de noviembre de 2018,
el artículo siguiente:
el artículo siguiente:
Mampato, una revista pensada para jóvenes lectores, se publicó entre octubre de 1968
y enero de 1978, lapso durante el cual llegó a sumar un total de 418 números.
Y a ella quedaron ligados de manera imborrable nombres como el de Eduardo Armstrong, creador y fundador de la revista;
Themo Lobos, Óscar Vega, Mario Igor y la escritora Isabel Allende, entre muchos otros.
En otras palabras, un conjunto de talentos que
coincidieron en el lugar y el momento precisos; una combinación de creatividad y cultura que no se volvería a repetir. Al menos, no de esa manera.
coincidieron en el lugar y el momento precisos; una combinación de creatividad y cultura que no se volvería a repetir. Al menos, no de esa manera.
En mi casa, por motivos que no vienen al caso explicar, nunca
se compró un solo número de ”Mampato”. Pero siendo un niño, durante
los años 70, sabía de su existencia y, de manera esporádica, tuve la oportunidad de
leer algunos ejemplares sueltos en las casas de mis amigos.
Y cada vez que lo hacía, la sensación era la misma:
terminaba con la necesidad, por no decir la urgencia, de leer otro.
La revista ”Mampato" parecía algo completamente distinto al
resto de las publicaciones que se podrían haber encontrado en un
quiosco de esos años. Pero, sobre todo, me llamaba la atención la variedad de tramas de cómics que se podían encontrar en su interior: desde
historias ambientadas en los tiempos de la Conquista española, hasta aventuras de piratas,
de exploradores que se adentraban en profundas y lejanas selvas,
mientras que otros personajes tenían la capacidad de
viajar a través del tiempo y el espacio. Y todos ellos, ilustrados en forma magistral…
se compró un solo número de ”Mampato”. Pero siendo un niño, durante
los años 70, sabía de su existencia y, de manera esporádica, tuve la oportunidad de
leer algunos ejemplares sueltos en las casas de mis amigos.
Y cada vez que lo hacía, la sensación era la misma:
terminaba con la necesidad, por no decir la urgencia, de leer otro.
La revista ”Mampato" parecía algo completamente distinto al
resto de las publicaciones que se podrían haber encontrado en un
quiosco de esos años. Pero, sobre todo, me llamaba la atención la variedad de tramas de cómics que se podían encontrar en su interior: desde
historias ambientadas en los tiempos de la Conquista española, hasta aventuras de piratas,
de exploradores que se adentraban en profundas y lejanas selvas,
mientras que otros personajes tenían la capacidad de
viajar a través del tiempo y el espacio. Y todos ellos, ilustrados en forma magistral…
Dibujos, fotos, cuentos y un largo etcétera me cautivaban cada vez que una revista ”Mampato” lograba caer en mis manos;
Y, por lo mismo, lamentaba profundamente no tener la oportunidad de leer
el próximo ejemplar en salir a la calle.
No obstante, mi pequeña revancha vino muchos años después, ya convertido en un adulto.
Todo gracias a las primeras compilaciones con las aventuras de Mampato,
el chico pelirrojo, que le daba nombre a la revista,,
el mismo que usaba gran cinturón especial para viajar al pasado y el futuro,
el que tenía como amigos incondicionales al cavernícola Ogú
y a una chica del siglo 40 de nombre Rena.
¿Cómo no dejarse llevar por historias así, escritas con el nervio de una serie de Netflix
ilustradas con un talento a toda prueba?.
De múltiples maneras, aquel joven Mampato acercó el mundo y la cultura al Chile de
entonces, sembrando la semilla de la curiosidad y el gusto
por la lectura.
Es que a medio siglo de la publicación de su primer número,
Mampato se nos presenta como un héroe de aventuras sin límites, era con un importante detalle:
Y, por lo mismo, lamentaba profundamente no tener la oportunidad de leer
el próximo ejemplar en salir a la calle.
No obstante, mi pequeña revancha vino muchos años después, ya convertido en un adulto.
Todo gracias a las primeras compilaciones con las aventuras de Mampato,
el chico pelirrojo, que le daba nombre a la revista,,
el mismo que usaba gran cinturón especial para viajar al pasado y el futuro,
el que tenía como amigos incondicionales al cavernícola Ogú
y a una chica del siglo 40 de nombre Rena.
¿Cómo no dejarse llevar por historias así, escritas con el nervio de una serie de Netflix
ilustradas con un talento a toda prueba?.
De múltiples maneras, aquel joven Mampato acercó el mundo y la cultura al Chile de
entonces, sembrando la semilla de la curiosidad y el gusto
por la lectura.
Es que a medio siglo de la publicación de su primer número,
Mampato se nos presenta como un héroe de aventuras sin límites, era con un importante detalle:
el rigor del contenido a lo largo de sus viajes.
Las fechas, los nombres, las ropas, los episodios históricos; todo eso y más está en
el corazón de sus aventuras, que demuestra la preocupacióny profesionalismo
de los hombres y mujeres que dieron vida a este personaje.
Las fechas, los nombres, las ropas, los episodios históricos; todo eso y más está en
el corazón de sus aventuras, que demuestra la preocupacióny profesionalismo
de los hombres y mujeres que dieron vida a este personaje.
Y, en especial, el rescate patrimonial
que hemos visto este año.
que hemos visto este año.
Me refiero a ”La gran aventura de Themo Lobos”, de Rafael Valle,
que dedica varios capítulos al trabajo de este artista en ”Mampato";
y los tomos recopilatoriosde Óscar Vega,
”Los increíbles viajes de Mampato” y
”Los increíbles viajes de Mampato” y
”Los viajes en el tiempo de Mampato", a cargo de su hijo Félix Vega,
que acaban de llegar a las librerías.
También es importante que para celebrar los 50 años de ”Mampato",
la Biblioteca Nacional haya anunciado que el próximo 23 de noviembre,
en laGalería de Cristal, inaugurará una exposición con portadas
emblemáticas e ilustraciones y dibujos originales.
Pero la nostalgia, además de ser una excelente forma de viajar al pasado, también puede;
ser una sutil trampa.
Sobre todo si el próximo año, todo este entusiasmo comienza a desaparecer.
¿Cuán factible sería repetir ese fenómeno editorial
en nuestros días, más allá de las compilaciones y merecidos tributos?
La respuesta no es fácil ni categórica.
que acaban de llegar a las librerías.
También es importante que para celebrar los 50 años de ”Mampato",
la Biblioteca Nacional haya anunciado que el próximo 23 de noviembre,
en laGalería de Cristal, inaugurará una exposición con portadas
emblemáticas e ilustraciones y dibujos originales.
Pero la nostalgia, además de ser una excelente forma de viajar al pasado, también puede;
ser una sutil trampa.
Sobre todo si el próximo año, todo este entusiasmo comienza a desaparecer.
¿Cuán factible sería repetir ese fenómeno editorial
en nuestros días, más allá de las compilaciones y merecidos tributos?
La respuesta no es fácil ni categórica.
A pesar de eso, el espíritu de aquel chico pelirrojo, ciento por ciento
chileno, hoy vive —por ejemplo—, en muchos
de los personajes de novelas gráficas como ”Mocha Dick. La leyenda de la ballena blanca”
chileno, hoy vive —por ejemplo—, en muchos
de los personajes de novelas gráficas como ”Mocha Dick. La leyenda de la ballena blanca”
y ”Alex Nemo y la Hermandad del Nautilus",
de la dupla formada por Francisco Ortega y Gonzalo Martínez.
O incluso en las post apocalípticas viñetas de una obra más adulta,
como es ”Juan Buscamares”, de Félix Vega.
A la vuelta de los años, Mampato y sus amigos
se han convertido en un regalo para el Chile de hoy y del futuro...
Escrito por: Alberto Rojas Moscoso, periodista, escritor y profesor universitario.
Para una mayor información sobre esta legendaria revista podemos acudir a:
http://www.mampato.aviacion.cl/index.htm
https://es.wikipedia.org/wiki/Mampato
https://www.cuartomundo.cl/etiqueta/50-anos-de-mampato/
https://www.tebeosfera.com/publicaciones/mampato_1968_lord_cochrane.html
de la dupla formada por Francisco Ortega y Gonzalo Martínez.
O incluso en las post apocalípticas viñetas de una obra más adulta,
como es ”Juan Buscamares”, de Félix Vega.
A la vuelta de los años, Mampato y sus amigos
se han convertido en un regalo para el Chile de hoy y del futuro...
Escrito por: Alberto Rojas Moscoso, periodista, escritor y profesor universitario.
Para una mayor información sobre esta legendaria revista podemos acudir a:
http://www.mampato.aviacion.cl/index.htm
https://es.wikipedia.org/wiki/Mampato
https://www.cuartomundo.cl/etiqueta/50-anos-de-mampato/
https://www.tebeosfera.com/publicaciones/mampato_1968_lord_cochrane.html
Con motivo de este acontecimiento y como homenaje a su autor, nuestro fiel colaborador Doncomic,
ha iniciado el escaneo, como siempre de una gran calidad, de la colección completa de
Las aventuras de Ogú, Mampato y Rena,
compuesta por 30 revistas y editada por Dolmen Ediciones entre los años 1996 y 1998.
Argumento y dibujos de Themo Lobos.
En esta compilaciones se incluyen historias inéditas y otras ya publicadas.
Comenzamos esta singladura con el nº 01, titulado
Kilikilis y Golagolas
Publicado en 1996 y consta de 50 páginas
Sinopsis:
Mampato salvó la vida a Xseturlz (Xse para los amigos), un pequeño extraterrestre
cuyo platillo volador se accidentó en nuestro
planeta. ambos viajaron al mundo natal de Xse, que estaba dominado
y sometido a la esclavitud por los verdines, raza alienígena
ansiosa por dominar la galaxia.
Nuestros amigos, comandando la resistencia, derrotaron a los
belicosos malvados y liberaron a los xagusos. los verdines y su
cruel jefe mong fueron expulsados del planeta Xagus.
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